Valentine Goby | 26 ABR 2016
- Carta abierta de escritores franceses con motivo del Día Mundial de la Propiedad Intelectual

De pequeña creía que todos los escritores estaban muertos. Sus mudos espíritus llevaban barba y mostacho encanecido. Los libros crecían en las baldas de las librerías y las bibliotecas, fecundados por la inspiración que, como es natural, caía del cielo. Yo escribía. No soñaba con ser escritora, únicamente existían los libros. Sigue leyendo